Las personas ególatras se creen inteligentes e imprescindibles. Pena penita pena.

Me quita el sueño aceptar que a quien se le pide que forme el Gobierno de España es la persona que quiere destruirla.

Conocer la realidad puede ser duro.

Resulta curioso que algunos puedan expresarse libremente y otros tengamos que mantenernos mudos.

Deberíamos plantearnos unas conductas estándares para las celebraciones religiosas.

Determinadas compras se realizan por consejos erróneos o simplemente por aparentar.

Menos quejarnos en casa y más hacerlo en la calle.

Que triste estudiar aquello que te gusta para acabar eligiendo el trabajo mejor pagado.

Cuando te das cuenta que enfadarse no ha servido de nada, ya es demasiado tarde.

Aunque lo das todo por ellos, tu tiempo y tu esfuerzo, no es suficiente. Eres mala madre.